Se presenta en la clínica "Bully" un pitbull de 1 año de edad que desde cachorro a presentado un prolapso de recto recidivante, tratado en varias ocasiones mediante la reducción manual del recto y sutura del ano en bolsa de tabaco. Su condición corporal es 2/5 y los continuos problemas gastrointestinales en forma de diarrea crónica (7 meses de evolucion) están agravando el problema.
Podemos apreciar la extrema delgadez de "Bully" y su evidente prolapso rectal. Es importante diferenciar un prolapso de recto de una intususcepcion prolapsada de intestino, para ello introducimos un termómetro entre la pared anal exterior y la masa prolapsada, si no pasa es porque choca contra la mucosa del recto prolapsado descartando de ese modo una intususcepcion intestinal.
Debemos intentar diagnosticar la causa que origina el prolapso rectal teniendo en cuenta que en animales jóvenes son las irritaciones intestinales causadas por parásitos, enteritis o cuerpos extraños las causas principales mientras que en animales adultos es el tenesmo producido por enf. prostatica, neoplasias de recto, estreñimiento o secundario a cirugías como la herniorrafia perineal.
Para solucionar el problema podemos actuar de diferentes maneras en función de la viavilidad del tejido prolapsado y de la frecuencia con que se presente el problema en el animal.
En nuestro caso la mucosa rectal no presenta lesiones importantes, el compromiso vascular no es severo, ni existen áreas de necrosis, es decir el tejido es viable y por lo tanto susceptible de su recolocacion mediante reducción manual.
Para reducir el edema podemos utilizar frió o soluciones hipertonicas durante 30 minutos. Luego mediante presión manual recolocamos la masa prolapsada, y finalmente realizamos una sutura en bolsa de tabaco del ano para evitar recidivas, anudando la sutura sobre un objeto (jeringa) para evitar el cierre completo del ano.
En casos en que la mucosa rectal este muy dañada y la reducción manual no sea posible debemos plantearnos la resección del recto prolapsado y anastomosis termino-terminal del mismo.
En nuestro caso como el problema ya se había presentado en numerosas ocasiones decidimos hacer una colopexia. La colopexia se realiza con el fin de crear una fijación estable entre el colon y la pared abdominal , para evitar su desplazamiento caudal y su prolapso.
Comenzamos haciendo una laparotomía infraumbilical para localizar el colon descendente.
Traccionamos del colon descendente hacia craneal y lo tensionamos para su fijación.
Con una gasa frotamos el borde antimesenterico del colon hasta provocar hiperemia del peritoneo que lo recubre, repetimos la operación en la pared abdominal izquierda a unos centímetros (2-4cm) de distancia de la incisión de laparotpmia.
Fijamos la pared intestinal a la pared abdominal con monofilamento absorbible, teniendo la precaución de englobar la submucosa del intestino pero sin perforarlo totalmente. Para concluir cerramos la laparotomia y pautamos tratamiento antibióticos durante 2 semanas.
A las 2 semanas revisamos al paciente y vemos como su condición corporal ha mejorado notablemente, no hay recidivas del prolapso y damos el alta medica.
Un saludo.